Una herramienta única que brinda horas de diversión recreativa, desafiante y agradable a los niños, niñas y adolescentes del vecindario. Los habitantes de este sector no tienen lugares seguros para jugar y disfrutar su niñez. Viven en o cerca de la zona de tolerancia y muchos viven con toda la familia en inquilinatos en una habitación alquilada. Las puertas se abren dos a tres veces al mes y llegan entre 100 y 200 niños y niñas. Pasan unas horas disfrutando del muro de escalar, el puente colgante, la casa de muñecas, las patinetas y más. Luego los dirigimos a la alabanza. Para algunos de ellos, esta puede ser la primera oportunidad que tienen de adorar al Señor. También reciben una enseñanza bíblica a través de dramatizados, títeres, escenografías, etc. De vez en cuando, llevan a la casa una manualidad sobre la lección bíblica del día. A medida que construimos la confianza con ellos también comenzamos a conocer su trasfondo sociofamiliar.
Ofrecemos dos veces al mes un taller de padres donde el enfoque es que sientan el amor de Dios y reciban estrategias para fortalecer sus hogares y relaciones.
A través de un convenio con una iglesia de la ciudad, los pre-adolescentes, adolescentes y jóvenes (de 10 a 18 años de edad) pueden inscribirse en el programa “Descubra”, que son talleres mensuales de capacitación básica laboral, para que desarrollen sus dones e intereses en un arte y/o profesión para el futuro. Los talleres son de artes plásticas, culinaria, diseño y moda, computación y estética.
Cada donación nos ayuda a mantener el programa y las instalaciones para cambiar vidas.
